La restauración de obras de arte es un proceso complejo y sujeto a múltiples factores. Dos pinturas con daños aparentemente iguales pueden necesitar tratamientos distintos. Vamos a tratar de resumir o simplificar (bastante) las tareas a las que nos encontramos habitualmente los restauradores de arte acerca de cómo restaurar una pintura al óleo.
¿Cómo restaurar una pintura?
En general podemos establecer estos pasos:
- Examinar la obra
- Limpieza de polvo
- Tensado de la tela
- Sentado de color
- Limpieza
- Relleno de faltas
- Reintegración de color
- Barniz final
Examinar la obra
Cuanto más examinemos la obra al principio más información obtendremos. ¿El soporte es un lienzo o es una tabla? Si es un lienzo ¿es algodón, lino o inorgánico? Y si es madera ¿qué clase de madera? Claro que también puede ser un mural. Básicamente los soportes pueden ser orgánicos o inorgánicos y el comportamiento ante la humedad relativa y nuestra intervención son distintos. Un estudio profesional conlleva realizar estratigrafías, análisis químicos, reflectografía infrarroja, radiografía, fluorescencia ultravioleta, etc. Todo ello nos dará mucha información de la técnica de ejecución de la pintura.

Limpiar polvo superficial
Más allá de un plumero suave que no deje restos, no recomiendo emplear nada. Podemos arañar y desprender fragmentos de la capa pictórica. Cualquier brocha o cepillo suave nos sirve para limpiar el reverso. ¡Sí, la parte trasera también se limpia! Normalmente olvidada, tanto si es una tabla como en los lienzos, se tiende a acumular polvo, insectos, detritus, telarañas y yeso de las paredes. Este último acaba marcando y deformando la capa pictórica al quedarse entre la tela y el bastidor. En este vídeo podemos ver la suciedad que se puede llegar a acumular entre la tela y el bastidor.
Corrección de abombamientos ¿ cómo tensar la tela?
Los lienzos necesitan una tensión parecida a la de un tambor. Si se queda floja acabará agrietándose y se caerá la pintura. Si nos pasamos acabaremos por ocasionar grietas. Para eso están las cuñas que vemos en las esquinas y travesaños. Por lo general será conveniente desmontar el cuadro del marco y ver si este deja mover el bastidor para el tensado. También aquí es importante saber la humedad relativa con la que vamos a actuar. Puede que falten trozos de tela como soporte en cuyo caso realizaremos injertos o que necesite un reentelado. O también que las deformaciones o rajas puede que sean ocasionadas por un golpe. Este proceso es largo de contar. Para no extendernos aquí les recomendamos que vean el artículo Cómo arreglar un lienzo roto o si las roturas son menores lean la corrección de deformaciones en San Rafael Arcángel.

Sentado de color o protección de la capa pictórica
¿Han visto esa imagen de cuadros con un papel de seda encima? Eso se hace con una cola animal diluida en agua. La concentración depende de que necesitamos. Relativamente floja si sólo es proteger porque a continuación vienen otros procesos. Algo más fuerte si necesitamos fijar las capas de preparación y pictórica entre ellas y a la tela soporte. Es un tratamiento de conservación y es imprescindible en la mayoría de ocasiones como puede ser un reentelado. El sentado de color es paso previo incluso antes de corregir deformaciones en la tela y nos ayuda a ello. En el vídeo de restauración de pintura de siglo xvii podemos apreciar como mantenemos el papel de seda hasta montarlo en el bastidor. El aporte de humedad facilita el montaje.
Limpieza de suciedad y barnices oxidados
Este es un punto de máxima importancia y necesidad de conocimientos. La limpieza de suciedad por acumulación no suele ser complicada. Normalmente empleamos algodón enrollado en unos hisopos del tipo pincho moruno y solventes muy suaves. Y no, nunca, pero nunca empleamos saliva, patata ni ocurrencias similares que vienen a ser mitos urbanos mal aconsejados. Todo aporte orgánico altera la obra. El agua puede llevar cal, siendo más o menos dura. Y los jabones comerciales por muy suaves que sean no son de PH neutro.
Si se trata de limpiar barniz hablamos de otro nivel. Los restauradores de ahora nos apoyamos mucho en la química. Ya no somos los artesanos de antaño. Para saber más: Cuándo un cuadro necesita una limpieza y limpieza de barniz craquelado.
¿Qué disolventes empleo en la limpieza de cuadros?
Los barnices aplicados en una pintura difieren según la época y tecnología imperantes en ese momento. Todo se reduce a química. Y si la pintura se ha intervenido anteriormente hay más factores en juego. Las combinaciones químicas que empleamos son dispares y complejas. No aptas para dar consejos facilones. Es como preguntar a un cocinero con que herramienta hace la comida. Sólo podemos comentar que una limpieza es irreversible. Y en el mundo de la restauración de obras de arte debemos intentar que todo sea reversible. No hay un liquido especial para limpiar cuadros antiguos. Igual que no hay una medicina que todo nos lo cure. Es un proceso lento y minucioso. En youtube hay ejemplos de malas limpiezas de barnices en cuestión de segundos. Borran barnices, pátinas y detalles quitando valor al cuadro. La eliminación de repintes o reintegraciones anteriores es un paso más allá. Por lo general, cuando hay color aplicado que no encaja con los de alrededor u oculta la capa pictórica original, debemos eliminarlo. Aquí sí vamos a fondo al tratar de quitarlos. No siempre es fácil hallar la mezcla de solventes adecuados para conservar la pintura subyacente sin afectar a la capa pictórica. La experiencia de años trabajando y estudiando no se pueden resumir en una frase ante la pregunta ¿Con qué líquido limpio un cuadro?

Relleno de faltas
Las faltas o lagunas debemos rellenarlas para nivelarlas con la capa pictórica. Tradicionalmente empleamos una mezcla de yeso y cola animal que llamamos estuco. Es parecida a la capa de preparación tradicional, pero podemos emplearla igualmente en la restauración de pintura contemporánea. Rellenamos las faltas con pinceles (estucar lagunas) y una vez secas, las rasamos habitualmente con bisturíes, con cuidado de no dañar la pintura. Relleno de lagunas en una tabla de la Virgen venciendo al demonio.
Aplicando color ¿Con qué reintegramos el color? ¿Empleamos óleo?
A la fase de dar color la llamamos reintegración cromática. Empleamos pinceles muy finos.y materiales estables y reversibles como acuarelas o guache para dar lo que llamamos bases. El caso es que sean de buena calidad. Podemos llegar a un buen resultado final reintegrando con ellas. Pero a veces tenemos que dar una ligera mano de barniz para avivar los tonos mate. En este momento las acuarelas no agarran sobre la capa normalmente oleosa del barniz. En este caso empleamos los llamados pigmentos al barniz para dar retoques. Pueden ser ya mezclados (Restauro Maimeri), mezclarlos nosotros o emplear Gamblin Colours que disolvemos en alcoholes.
No empleamos óleo en restauración de arte
Y no, nunca empleamos óleo para la restauración de pintura, sean óleos o acrílicos. Ya desde mediados de 1.800 se recomendaba no emplear óleo para la reintegración a favor de pigmentos al barniz dada su irreversibilidad. Quien recomienda emplear óleo para reintegrar, además de demostrar desconocimiento por la profesión, nunca ha limpiado un repinte de naturaleza oleosa.
Si observamos de cerca una reintegración quizás podamos apreciar una serie de lineas o rayas. Esta pueden ser de tipo invisible o con tintas planas. Pero lo más habitual es emplear técnicas como tratteggio de líneas inclinadas o cruzadas, Rigattino (Regatino en español) cuando interpolamos colores con líneas verticales, Punteado o puntillismo a base de puntos. Estas se basan el leyes de percepción visual en las que al igual que las revistas o las vayas publicitarias, el ojo y el cerebro son los que mezclan los colores. Empleamos colores similares a los circundantes para que sea reconocible la intervención colocándonos cerca de la intervención. Pero a una distancia, esta pasa desapercibida, integrándose con el resto.
¿Aplicamos barniz a la pintura?
¿Barniz mate, satinado brillante? ¿O ninguno? Para gustos colores. El barniz final además de servir de capa de protección ante futuros agentes externos, ayuda a realzar los colores. Pero ¿con más o menos brillo? Por lo general empleamos barniz satinado salvo casos concretos de obras concretas, normalmente contemporáneas. Lo damos a brocha o en spray. Depende de la obra, el tratamiento efectuado o el material.
Barnizando pintura: óleo sobre lienzo en techo.